Aunque parezca mentira, el verano está casi terminando. ¿A ti también se te ha pasado volando? ¡Esperamos que lo hayas podido disfrutar, o que disfrutes de las semanas que te quedan! Y es que es precisamente durante esta estación del año, cuando exponemos nuestra piel al sol durante periodos de tiempo más prolongados de lo habitual. Y mucho más este año, que hemos pasado de estar confinados en casa, ¡a salir a la calle con muchísimas ganas! Sabemos que has estado protegiendo tu piel a lo largo del verano; pero no queríamos dejar de contarte cómo aparecen las manchas, qué tipos de manchas hay y cómo prevenirlas.
La melanina
Para hablar de las manchas en la piel, sobre todo las que nos salen de forma localizada en el rostro, manos y escote, es interesante conocer previamente qué es la melanina. ¿Habías oído hablar de ella? ¡Seguro que sí! Es la encargada de dar color a nuestra piel, a nuestro pelo, ¡y hasta de dar el color a nuestros ojos! La melanina que da la pigmentación a nuestra piel, es conocida como la melanina dérmica.
Los melanocitos son las células encargadas de producirla y se encuentran distribuidos en nuestra epidermis, es decir, a lo largo de nuestra parte más superficial de la piel. De este modo, si padecemos de problemas de pigmentación en la piel, es debido a un mal funcionamiento de la melanina. Las manchas aparecen cuando la melanina aumenta en exceso, repartiéndose así de forma irregular y por lo tanto acumulándose en distintas zonas de nuestra piel. En este caso, estaríamos hablando de manchas por hiperpigmentación; pero puede ocurrir todo lo contrario, que los melanocitos no segreguen la melanina suficiente, produciendo así una hipopigmentación en la piel, o lo que conocemos comúnmente como “manchas blancas”.
Las manchas en el rostro por hiperpigmentación
Antes de nada, nos gustaría comentarte que aunque sepamos que existen distintos tipos de manchas en el rostro, no todas las manchas en la piel son iguales ni podrían aparecer de la misma manera, por lo tanto, siempre te recomendamos que acudas a tu dermatólogo para que pueda diagnosticarte de la manera más adecuada cómo tratar tus manchas en el rostro y evitar riesgos. ¡El cuidado de tu piel siempre en las mejores manos!
Nos parecía interesante, y muy conveniente por la época del año, contarte un poco más sobre las manchas por hiperpigmentación. De este modo, vamos a contarte brevemente qué tipos de manchas existen y por qué razón aparecen:
1. Léntigo solar y manchas de la edad
Son manchas oscuras de color marrón redondeadas y planas que aparecen en nuestra piel debido a la exposición prolongada o intensa al sol. Podemos notar la presencia de estas manchas en el rostro tanto por estar expuestos al sol de manera intencionada, tomando el sol en verano o cualquier día de esos de invierno en los que vemos aparecer un rayito de sol; o de manera indirecta, por ejemplo, teniendo un trabajo que nos obliga a estar al aire libre sin posibilidad de protegernos del sol.
Todos somos potencialmente susceptibles a desarrollar este tipo de manchas y casi un 90% de las mujeres blancas de más de 50 años desarrolla manchas; aunque siempre que estemos bien protegidos, el riesgo puede resultar menor. En este tipo de manchas en el rostro hay una relación directa entre el sol y las manchas de la edad debido al envejecimiento de las células. Por lo tanto, con el paso del tiempo, ciertas partes de nuestro cuerpo más expuestas al sol, padecen más riesgo de hiperpigmentación.
¡Protege tu piel del sol!
¡Nunca nos cansaremos de decir lo importante que es la protección solar! Sabemos que en esta época del año, tomamos muchas veces de forma intencionada el sol, pero también ocurre de manera indirecta. Incluso, como ya te hemos comentado alguna vez, los días nublados también pueden ser traicioneros para tu piel. De hecho, dos terceras partes de la exposición al sol que recibimos a lo largo de nuestra vida diaria, es de manera accidental: por ejemplo, conduciendo, caminando de casa al trabajo o yendo a hacer la compra. ¡Nuestra piel es nuestra casa y por ello, merece ser cuidada al máximo! Por este motivo, te recomendamos que le eches un vistazo a la amplia gama de Solares imprescindibles para primavera y verano, donde seguro que encontrarás el protector adecuado para tu piel.
2. Las pecas
Volviendo a los tipos de manchas por hiperpigmentación, las pecas son muy comunes y todos sabemos identificarlas con facilidad. Suelen aparecer en pieles más claras, por una cuestión genética, por una cuestión hormonal o bien por la exposición al sol. Son zonas donde los melanocitos presentan más actividad, llevando a cabo una coloración más intensa.
3. Melasma
Este tipo de manchas son el resultado de cambios hormonales debido al embarazo o al uso de anticonceptivos orales. Específicamente en las mujeres con fototipo III y IV, estos cambios hormonales pueden dar como resultado la aparición de estas manchas en el rostro. Aún habiendo un reajuste hormonal después del embarazo, este tipo de manchas pueden persistir por un tiempo.
4. Manchas debidas a lesiones de la piel
Si nuestra piel ha sufrido lesiones, es más vulnerable a sufrir los daños que puedan ocasionar el uso de ciertos productos que puedan resultar perjudiciales, o la mera exposición al sol o el daño ocasionado por agentes externos. Por lo tanto, podrían aparecernos manchas pigmentarias. Aún así, como hemos dicho anteriormente, siempre es importante, ¡sino lo más! acudir a nuestro dermatólogo de confianza.
¡Tu piel es bonita tal y como es!
Queremos vernos una piel sana, que tenga luz y se mantenga firme; pero nuestra piel forma parte de nosotras, ¡no va por cuenta propia! y va cambiando igual que lo hacemos nosotras a lo largo de nuestra vida. Por ello, tengas la piel que tengas, ¡es bonita tal y como es! Tu piel eres tú, no lo olvides. Así que recuerda cuidarla y mimarla. Seguro que has oído alguna vez aquello de: ¡la piel tiene memoria! Y así es, un mal cuidado de nuestra piel, por ejemplo, durante el verano, tendrá sus efectos negativos a lo largo de los meses, incluso a lo largo de los años. Así que ya sabes, intenta que tu piel tenga buenos recuerdos. ¡Mímate y cuídate a lo largo de todo el año!